De una semana a una hora: la transformación del QA en un proyecto

CÓDIGO ABIERTO

De una semana a una hora: la transformación del QA en un proyecto

25 septiembre 2025

Cómo pasamos de pruebas manuales a un testing automatizado que multiplicó la eficiencia y redujo costes

Antes de hablar de resultados y mejoras, para entender el impacto de los cambios en este proyecto, merece la pena detenernos un momento y recordar en qué consiste el trabajo de un QA (Quality Assurance) o tester. Pues va mucho más allá de identificar errores. Su labor es garantizar que el software cumpla con los estándares de calidad, seguridad y funcionalidad. Cada aplicación, sistema o plataforma que utilizamos de manera cotidiana ha pasado por rigurosas pruebas, diseñadas para proteger la experiencia del usuario y evitar posibles fallos con consecuencias económicas, operativas o incluso de seguridad. En un entorno digital donde la confiabilidad es clave, los testers se consolidan como guardianes de la eficiencia tecnológica.

En una entrevista con José Vicente Fayos, QA Analyst en MindDen nos explica muy bien la importancia de esta figura:

 

 

“La respuesta desde negocio fue que era una pérdida de tiempo”

En este proyecto, el equipo de MindDen se enfrentaba a un desafío común en muchas empresas: las regresiones manuales consumían una semana completa de trabajo de al menos dos QAs, ralentizando los despliegues y aumentando los riesgos de errores en producción.

Lanzar el MVP (Minimum Viable Product), es decir, la primera versión de salida a producción, en esa situación te encuentras con un proceso lento y costoso. Así lo expone uno de nuestros compañeros que forma parte activamente en este proyecto:

Cuando un producto no inicia con pruebas automatizadas, la carga del QA aumenta de forma exponencial. Eso se traduce en equipos saturados, menos capacidad de innovación y mayores costes operativos.

Y esto no es un caso aislado, de hecho es algo que pasa habitualmente. Pues para empezar a cambiar esta dinámica había que pasar por un proceso. Había que presentar una propuesta acorde a las necesidades de este proyecto.

De semanas a horas: cómo lo logramos

Nuestro equipo propuso una solución estratégica y gradual: incorporar un QA junior durante tres meses para apoyar las pruebas manuales y liberar tiempo del resto del equipo, de modo que pudieran automatizar pruebas por bloques y mostrar mejoras progresivas al negocio.

Nuestro compañero lo resume así:

Los resultados: más calidad y en menos tiempo

La transformación fue evidente:

  • Hoy, las regresiones incluyen más de 50 tests automáticos.
  • El tiempo se redujo a 4 horas en serie y apenas 1 hora en paralelo.
  • Se añadieron pruebas de rendimiento, estrés y servicios.
  • Mejor monitorización de los tests unitarios y la claridad de los reportes.

Todo ello con un impacto directo en lo que más importa a nuestros partners:

  1. Reducción de costes operativos.
  2. Velocidad y fiabilidad en los despliegues.
  3. Equipos motivados, enfocados en aportar valor real.

Un cambio cultural, no solo técnico

Lo más valioso no fue solo el avance técnico, sino el cambio de mentalidad.
Lo que antes se consideraba una “pérdida de tiempo” pasó a ser un pilar estratégico del proyecto.

En MindDen creemos que apostar por la automatización en QA no es un lujo: es garantizar calidad, eficiencia y confianza para el presente y el futuro del producto.