Protección de datos en línea de filtraciones y ciberataques
El método para contraseñas seguras y a prueba de hackeos
29 enero 2024
En un mundo digital cada vez más vulnerable a filtraciones de datos, la seguridad de nuestras contraseñas se vuelve crucial. El método de Diceware emerge como una solución para generar contraseñas robustas y fáciles de recordar. En este artículo, explicaremos cómo Diceware puede ser la clave para proteger tus datos en línea frente a amenazas cibernéticas.
Dicen que la contraseña ideal debe ser fácil de recordar y difícil de averiguar. Por ello, para conseguir que tu acceso sea seguro, el método «diceware» es una de las mejores maneras de crear una buena contraseña: sólo necesitas un dado, sea digital o físico, y tener paciencia hasta conseguir tu contraseña a prueba de ataques cibernéticos.
El método de Diceware es una técnica de generación de contraseñas que se basa en el uso de palabras aleatorias seleccionadas de una lista predefinida. A diferencia de las contraseñas tradicionales que suelen consistir en combinaciones de letras, números y caracteres especiales difíciles de recordar, Diceware simplifica el proceso al emplear palabras comunes y fáciles de recordar.
¿Cómo crear mi contraseña?
1. Lanzar el dado. Para cada palabra que forme tu contraseña, se requieren cinco lanzamientos del dado. Los números (del 1 al 6) conforman una cifra de cinco dígitos, por ejemplo, 52336. Ese número te servirá para buscar una palabra en una lista que está disponible en diferentes idiomas, incluidos el español o inglés.
2. Repite el proceso. Se recomienda una longitud de al menos seis palabras para garantizar una seguridad sólida. Por lo tanto, lanza el dado las veces que sean necesarias para obtener una contraseña segura.
3. Forma tu contraseña. Une las palabras seleccionadas para formar tu contraseña. Puedes optar por separarlas con espacios o incluir caracteres especiales entre ellas para mayor complejidad.
4. Almacena de forma segura. Memoriza tu contraseña o almacénala de manera segura, preferiblemente en un gestor de contraseñas cifrado. Evita anotarla en lugares fácilmente accesibles.
Y recuerda que las contraseñas deben cambiarse periódicamente (cada tres meses) para mantener la seguridad a largo plazo. Siguiendo estos pasos, no solo vas a proteger tus cuentas o información en línea, sino que también simplificas el proceso de recordarlas.